Arte y Legado

Los grabados de Julio Pantoja Rodulfo representan una faceta menos conocida, pero profundamente significativa de su obra. Realizados principalmente entre los años 40 y 50, estos trabajos muestran su maestría tanto en técnicas tradicionales (como la xilografía) como en el grabado en metal, con un lenguaje que va desde lo figurativo andino hasta la abstracción más libre.

Con trazos decididos y composiciones de alto contraste, sus grabados capturan escenas de la sierra y la selva peruana: rostros hieráticos que se funden con la naturaleza, cuerpos que cruzan ríos ancestrales, y figuras femeninas envueltas en la frondosidad del bosque. La técnica es rigurosa, pero el mensaje es espiritual y telúrico.

Estas obras le valieron reconocimientos como el premio de grabado Primer Certamen Latinoamericano de Xilografía, Buenos Aires Argentina (1960) y formaron parte de exposiciones nacionales e internacionales.